Asegura tu Visibilidad En la oscuridad, la visibilidad es clave. Antes de iniciar la ruta, revisa que el sistema de alumbrado funcione adecuadamente, reemplaza las bombillas fundidas, comprueba que las ópticas y cristales estén limpios y regula las luces para obtener una visión óptima.

Adapta tu Velocidad La velocidad es un factor crucial durante la conducción nocturna, es recomendable aumentar la distancia de seguridad con el vehículo precedente para tener mayor tiempo de reacción ante imprevistos y poder disfrutar de una experiencia de conducción nocturna única.

Evita las Distorsiones Visuales Los deslumbramientos y reflejos pueden dificultar la visión nocturna. Una luna trasera y un parabrisas limpio proporcionan mejor visibilidad por el día, y durante la noche, evitando reflejos molestos.

Preparación del Vehículo Mantener tu vehículo en condiciones óptimas es esencial. Realizar una revisión previa del vehículo antes de iniciar la ruta es esencial para viajar con la mayor seguridad posible, sobretodo en trayectos largos. En la siguiente entrada ofrecemos una seria de CONSEJOS PARA VIAJAR EN COCHE, que te pueden resultar útiles para planificar tu viaje.

Manejo de la Fatiga La fatiga puede intensificarse durante la noche. Se puede deber a factores externos al conductor como puede ser viajar con una temperatura inadecuada, exceso de ruido, monotonía, etc, o a factores internos relacionados con el propio conductor debidos a periodos de conducción prolongados, alimentación inadecuada o comidas copiosas… Para combatirla es recomendable mantener bien ventilado el habitáculo del vehiculo, descansar cada dos horas o cada 200 kilómetros, y sobre todo haber descansado bien antes de emprender el viaje.

Encuentra Paradas Estratégicas Planificar paradas estratégicas no solo te permite descansar, sino que también contribuye a una experiencia más placentera y segura durante la ruta nocturna.